lunes, 5 de junio de 2017

REVIEW: SADAKO VS KAYAKO

REVIEW: SADAKO VS KAYAKO

Después de poco menos de un año de su estreno en las tierras niponas, Sadako vs Kayako arribó a las pantallas grandes mexicanas.

Como antecedente, puedo decir con cierto orgullo que desde muy pequeño conocí ambas películas de las cuales las protagonistas hacen presencia en esta última.

Primero, La Maldición. Película que, siendo moderna, me dejó una huella con ese sonido particular de Kayako como alguna especie de engranajes con óxido moviéndose lentamente. No tardé en ver la secuela, la cual no me decepcionó en lo más mínimo. La tercera, tardé un poco más, puesto que a los siete años mi madre no consideraba adecuada. Por último, la vi, satisfecho con la trilogía. Más temprano que tarde me enteré que tenía más películas la franquicia de La Maldición, películas que por uno u otro motivo no habían sido tan populares como las versiones americanas. Entusiasmado tomé la computadora y en un impulso de felicidad por conocer la historia más a fondo, me atiborré de una serie de alrededor de diez películas en un par de días. Sin duda alguna el señor Takashi (Creador de la historia y películas) había hecho un excelente trabajo.

Pero bien, en sí, ¿Qué es la maldición?
En breves palabras, que inclusive aparecen al inicio de las películas, su concepto se define cuando una persona muere víctima de una profunda e intensa ira, nace una maldición. La maldición se instala en el lugar donde esa persona ha muerto o en los sitios que frecuentaba, y allí se repite. Todo aquel que se tope con la maldición, ya sea por haber entrado en el lugar maldito o por entrar en contacto con alguien ya maldito, resulta fatalmente afectado por la maldición, lo cual supone el origen de una nueva maldición y que pueda propagarse como un virus, incluso a otros lugares. El desenlace de la maldición es, inexorablemente, la muerte.

Por otro lado, tenemos a Sadako, o Samara (Su versión occidental, y por la cual conocí). El argumento de la película es simple, un poco fantasioso, pero original. Cuando alguien tiene el infortunio de ver una cinta VHS, esa persona es llamada y muere en un corto plazo de tiempo. La cinta, obviamente, esta maldita por un ser llamada Sadako, o Samara en la versión occidental. Claramente, justo como en La Maldición, hay variaciones entre las versiones originales (japonesas), y las adaptaciones occidentales. De igual manera, las adaptaciones son buenas. Sin embargo, no pueden lograr lo que los japoneses logran hacer en verdad: Calar los huesos del espectador llenándolo de intriga esperando que pueda pasar en un ambiente oscuro y denso. Es algo que, por decir de alguna manera, solo los japoneses son capaces de hacer en el campo del Terror, Horror y Suspenso (Cinematográfico), o al menos los que más destacan por ello.

Ambas producciones, tanto japonesas como occidentales, son buenísimas. Haciendo mención especial a otra saga japonesa que tuvo su versión occidental: La Llamada Perdida. Son películas que, a mi parecer, no han sido superadas tanto por su historia, como por lo atrapante y oscuras que pueden llegar a ser. Hablando de películas modernas, claro está.  

Pero, ¿Qué es lo que pasa cuando a un asiático se le ocurre juntar dos de las mejores franquicias cinematográficas del terror japonés? El producto: Sadako vs Kayako, o El Aro vs La Maldición (Pésimo nombre occidental).

El viernes hablaba con un amigo sobre ir al cine a ver alguna película en cartelera. Buscando que habría y me topé con el anuncio de tres funciones para esta. Me sorprendí después de un año casi de haber visto anuncios y no saber nada hasta ahora. Sin pensarlo me dispuse a verla, pero no mi amigo. Sus expectativas sobre la calidad de la película rozaban el suelo.


A las once de la noche del sábado iba empezando la función y la sala estaba semi vacía. Los cortos comenzaron y me maravillé al ver el corto de una película que se veía prometedora acerca de una persona con poderes de ver el futuro. Pero, lo que en verdad saltó como la última tortilla de la taquería, fue el tráiler de IT (eso) en pantalla grande. Ya lo había visto en internet, pero en pantalla grande se apreciaba de lujo. Terminando el tráiler, siendo el momento perfecto, se desvanecieron las luces dejando la sala en la oscuridad total. De repente, comenzó la película.

No habrá spoilers en un principio, sin embargo, hay varios aspectos que vale la pena tener en cuenta. 


Primero y principal, los personajes Sadako, Kayako e inclusive Toshio, el niño de La Maldición, no son iguales. Los actores cambian, y por ende pierde un poco la esencia. Pero, ¿Qué se le va a hacer? El niño creció, y Sadako y Kayako pareciera que la edad adulta también les pegó.
La película comienza con dos historias separadas. Por un lado, una muchacha con sus padres que se mudan junto a la casa de Kayako. Por el otro, dos jóvenes que al comprar una videocasetera se encuentran con la cinta de Sadako.

Estas últimas dos muchachas acuden con un profesor el cual aparenta saber del tema. Tras ver el video el también, opta por llamar una médium y tratar de arreglar el problema.

Otro punto es que hay que recordar que es un Crossover, pero, eso no da derecho suficiente para no tener la decencia siquiera de no cometer atrocidades. 


***Ojo, a partir de aquí habrá spoilers, léelo bajo tu propio riesgo***


Por ejemplo: Poner el pozo de Sadako en el patio trasero de la casa de Kayako. Que, por cierto, la casa cambió enormemente. Es parecida, pero se nota por mucho la diferencia.

Tenemos al profesor obsesionado por la leyenda de Sadako y, gracias a esta obsesión, termina en manos de ella. No sin antes ir con la médium a la que había consultado para practicar un exorcismo.

La médium, precavida, ya había llamado a un muchacho que no tardaría en llegar tras ocurrir lo que ella temía. El muchacho, al parecer tiene poderes para combatir a estos malos entes y va acompañado de una niña ciega que es su compañera.

La película es entretenida, vale la pena verla. No obstante, te encontraras con desperfectos muy notables acerca de las películas de cada saga, tanto de La Maldición, como la de El Aro. Y, por ende, cosas absurdas y fuera de lugar. También un poco de comedia, cosa que no se acostumbra en esas sagas.

Para concluir, tenemos el final. Una idea sacada del país de las brutalidades y el desprecio a las ideas decentes. No puedo decir más allá de que es algo que simplemente… no va ni con La Maldición, ni con El Aro. Y no, no pueden decir que fue para innovar la franquicia, no. Una zurrada total. Creando una especie de monstruo imparable.

Al sujeto con poderes no se le ocurrió mejor idea que ir a la casa de Kayako y llevar a Sadako para ponerlas a pelear y se destruyeran una a la otra.


De por sí Kayako es imparable, para quien no haya visto las versiones japonesas, tiene que verlas. Ya en las occidentales se aprecia la extensión que puede llegar a tener y como es imposible detenerla. Y ahora, sumarle a Sadako… Se quedaron sin ideas. Crear algo así con dos personajes icónicos del terror moderno, viniendo de un japonés, es decepcionante

Como nota final, quiero agregar que la pelea fue poco satisfactoria y, desde mi punto de vista, equipararon mucho el poder de Sadako contra el de Kayako, siendo que Kayako es, por mucho, más fuerte que Sadako y pudo haber terminado con ella en cuestión de poco tiempo. 

Además, el principio tardó demasiado para unir las historias, y llegaba a ser un tanto aburrida, despertando el interés y animo solo por pequeñas cosas que valieron la pena o apariciones de estos seres.

Calificación

Gráficos: 8, fueron buenos, pero insistiré que para el terror y suspenso es mejor no usar los mejores gráficos posibles.

Historia: 5, le faltó mucho. Como ya dije antes, tardó mucho en unir las dos historias principales y el final fue hasta cierto punto un poco forzado a ser rápido. Seguro pudieron hacer un desenlace mucho, mucho, mejor.

Musicalización: 8, la ambientación fue buena. No hay quejas a excepción de los créditos finales, seguro pudieron poner algo mejor que lo típico y repetitivo de algo de rock. Y en vez, poner algo de suspenso. Pero a esas alturas ya no se podía tomar tan en serio el final de la película como para una ambientación tétrica.

Duración: 7, si la hubieran extendido unos 15 minutos más, estoy seguro que hubieran tensado los nervios incluyendo de suspenso clásico de las películas de La Maldición.

Total: 6, la consideraría más un tributo que una secuela, precuela, spin-off, o como se le quiera llamar, de ambas sagas.

Hubo un punto en el que me vino a la mente El Resplandor, de Kubrick. ¿Por qué?, porque le cambian tantas cosas de la historia original, tal como lo hizo Kubrick, que pierde una esencia muy importante. Aunque a diferencia del filme de Stanley, esta película, seguro que no pasará a los anales de la historia cinematográfica.
Créditos de la imagen al creador de la misma.